La locura catalana y los locos de Sant Boi

“En el sanatorio mental de Sant Boi pasan de las manifestaciones de los nacionalistas, de los socialistas, de los convergentes ucedeos, y de los comunistas. Están locos. Algunos clásicos vieron en la locura una señal de la suprema sabiduría”. Así comienza la crónica de lo ocurrido el 11 de septiembre –día de la suprema catalanidad–…

Una pequeña historia de latidos

Una pequeña plazuela empedrada en lo alto del pueblo granadino de Salobreña. La llaman El Corralón. Dos músicos (la Brigada Bravo&Díaz) sobre el escenario interpretando canciones de la Primera Guerra Mundial e himnos anarquistas de la Guerra Civil española. La mente perdida junto a mi amiga Alicia sintiendo los latidos de otros tiempos incrustados en…

Me quedo contigo (o el rock kinkidélico)

He intentado explicar a mi hija trapera que Rosalía nació en una gasolinera y me ha me ha dicho que no le venda motos. Utilicé una hipérbole para decirle que años ha el tótem de la cultura no estaba en una nube, en YouTube o en una plataforma en streaming, sino en un mueble giratorio de…

Deseos y placeres para 2019

Voy rapidito. Antes, cuando tenía donde publicar, cada final de año hacía un resumen con las mejores imágenes eróticas a modo de regalo morry christmas. Había pensado para estas navidades hacer un listado de sugerencias mirando al 2019: que si un libro, que si una canción, que si aparato tecnológico, que si un juguete sexual,…

El ‘perroflauta’ Lenore ajusta cuentas con la Movida

Los ajustes de cuentas se pueden hacer desde el rencor y la amargura, desde la rabia por lo no vivido. Incluso desde el amor o la envidia. O desde la atalaya de la distancia. Con rigor o mala baba. Y los puedes hacer desde un piso del barrio del Pilar de Madrid escuchando a Luis…

Ya no hay chicas punkis

Había días que Mar se maquillaba en el ascensor. Primero, una base de color blanco. Después quemaba la punta del lápiz negro para perfilar ojos y labios. Negro punk. Antes, en casa, se había erizado el pelo con una mezcla de agua, azúcar y «laca de la mala». La cresta era barata. Por la chupa…

Y Niño de Elche lo vomitó todo

Niño de Elche no está gordo. Lo que pasa es que se ha comido los poemas fonéticos de Hugo Ball, los cantos gregorianos de la misa tredentina, a Aristoteles por seguiriyas, la bomba gitana de Lola Flores, a Pepe Marchena, media Gran Vía zarzuelera y tanguera, una deconstrucción de García Lorca y la voz lisérgica…